Los óvulos y espermatozoides utilizados se obtienen de la pareja en tratamiento, pero en caso necesario y bajo consentimiento de ambos, la obtención se puede hacer también por medio de donación.
Este procedimiento es recomendado cuando existe: alteraciones masculinas moderadas o severas, una alteración en las trompas de Falopio o ligadura de las mismas, falla ovulatoria, falla en tratamientos previos con inseminaciones, edad avanzada, endometriosis, etc.
La tasa de embarazo con la fecundación in VITRO, dependiendo del diagnóstico de la pareja, es de hasta 60% si se utilizan óvulos y espermatozoides propios, y de hasta el 70-80% si se utiliza la donación de óvulos.